El objetivo de la contabilidad se basa en proporcionar información a los diferentes usuarios (accionistas, trabajadores, clientes, proveedores, acreedores…) para la toma de decisiones. Esta información debe representar la imagen fiel de la empresa en el momento de su redacción. En ocasiones estas normas dejan en manos de los contables la elección entre varias alternativas expuestas por al norma.
Pero cuando las normas dan lugar a realizar estimaciones por parte de los contadores, elegir entre diferentes criterios… ¿Se escoge la forma adecuada para representar la imagen fiel o se escoge la que interesa a la empresa para crear una imagen que deje satisfechos a los usuarios? Aquí es donde nace la contabilidad creativa.
La contabilidad creativa consiste en saber aprovechar las oportunidades que las normas ofrecen a los contables, para que los resultados obtenidos al elaborar la información se aproxime más a sus intereses que a los objetivos de la contabilidad (imagen fiel).
Esta forma de hacer contabilidad puede verse desde dos puntos de vista; por un lado, se puede pensar que esta bien saber manejar las normas hasta tal punto que se beneficie uno mismo, y que mientras este dentro de las normas las acciones realizadas en la preparación de la información no hay nada malo en ello.
Pero por otro lado, y en este es en el que me sitúo, se puede pensar que es un fraude. Pues aunque la norma de a elegir entre varias alternativas, lo hace con un fin bastante claro (y que se viene repitiendo durante todo el texto: representar la imagen fiel de la entidad), que seguramente no se corresponderá al que persiguen los contables que llevan a cabo la contabilidad creativa, pues estos representan la imagen que las beneficia a su empresa. Pero como dice la expresión “quien hace la ley, hace la trampa” y mientras que este dentro de la ley, no se les puede atacar por esta actividad.
En mi parecer, la utilización de este tipo de contabilidad “creativa” debería de controlarse. Pues como podemos ver en acciones como las que relata este artículo(pincha aquí), las acciones como esas no son ilícitas.
Si un país realice esta clase de contabilidad, ¿que no harán las empresas? Este, a mi parecer, “fraude” debe de penalizado.
Las instituciones internacionales de contabilidad deberán fijarse como objetivos a conseguir, desde mi punto de vista, además de una homogeneización de las normas contables, la profundización de las normas que dan lugar a la contabilidad creativa para eliminarla.